La ameba malota

La ameba malota

Trabajo en equipo y un par de cosas más

5 minutos de lectura

Hace ya tiempo que no me paso por aquí. ¿No te pasa que a veces acabas tan agotadx después del trabajo que no quieres ver un ordenador ni en pintura?

Pues eso me ha estado pasando a mi los últimos meses, pero bueno ya apetecía pasarme de nuevo por aquí para aburriros con mis historias 🙂

Sin embargo, este tiempo de silencio me ha servido para traerte unas reflexiones que ya tenía claras, pero que he vuelto a revivir y confirmar con más fuerza aún.

Te comparto algunas cosas que he reaprendido en los últimos meses.

¿Va a funcionar? Si remas, sí

Para ilustrar mi primer aprendizaje te comparto esta viñeta de 72kilos. Puede aplicarse a una relación de pareja o familiar, por ejemplo, pero en este caso la quiero vincular al entorno de trabajo.

Si has ido leyendo mis posts, sabes que valoro mucho el trabajo en equipo, pero ahora lo veo de otra manera.

Antes pensaba que trabajar en equipo era la clave del éxito pero creo que es mucho más que eso. No solo se trata de sacar el trabajo adelante a toda costa, sino de cómo se saca adelante y en qué estado te deja.

Por eso pienso que, más allá de éxitos o fracasos, trabajar en equipo afecta e influye directamente en muchos más ámbitos: salud mental, estabilidad, estado de ánimo, carga emocional, desconexión…

Sentir que todos peleais por un objetivo común y remáis en la misma dirección, hace que lo bueno se viva con entusiasmo, pero que lo malo se comparta y se relativice también en equipo.

Tener la certeza de que si vienen inconvenientes tienes a tu alrededor una red que, no solo te va a ayudar a encontrar soluciones, sino que te va a escuchar y estar ahí cuando necesites un desahogo, quita un peso de los hombros importante.

compañeros de trabajo

Como Product owner, muchas veces me siento sola dando la cara en situaciones complicadas, pero este año he aprendido que si yo no sé la respuesta, alguien del equipo la dará; que si no consigo hacer entender algo, algún compañero me echará un cable para explicarlo de otra forma; y que si no sé por dónde seguir, entre todos hallaremos la respuesta.

La humildad siempre por delante

Esta imagen trata más bien de que por tener un puesto más alto, no tienes derecho a ser estúpido con los demás. Pero mi reflexión va más allá.

humildad

Nada justifica ser desagradable ni con compañeros, ni con clientes ni con otras empresas proveedoras.

Yo he estado pasando una época complicada a nivel de salud y de estrés, que hacia que no fuera yo misma y que tratara a los demás mal. No hay excusa para eso. Todos tenemos problemas y si lo pagáramos con los demás seríamos intratables.

estrés

Por eso la comunicación y la confianza para marcar lo que necesitas y cómo te sientes en cada momento son muy importantes: hoy no me encuentro bien; si veis que estoy más irascible no lo tengáis en cuenta; hoy estoy más seria por esto o por aquello pero no es por vosotros, etc.

Y esto va relacionado con la reflexión anterior, un equipo de verdad entiende estas situaciones y las apoya: como hoy no estás al 100% nosotros te cubrimos; movemos esta reu si quieres y vemos el tema en otro momento; te ayudo con esta tarea y la hacemos juntos más rápido…

descarga de estrés

No operamos a corazón abierto

En mi empresa tenemos una frase que siempre repetimos: “No operamos a corazón abierto”, y es verdad. No hay nada tan importante, urgente o crítico que merezca tu salud, tu ánimo y tus desvelos. Por eso es imprescindible el trabajo en equipo que te decía: sentir que compartes la carga te da seguridad y tranquilidad.

Hace poco, le preguntaba a una persona que he conocido en el trabajo y a la que he cogido mucho cariño, cómo hacia él para que no le afectaran los marrones que teníamos cada dos por tres y no estar llorando cada 5 minutos.

bromas

Me explicó que su padre era médico de urgencias y que cada día veía y experimentaba cosas muy duras. Aún así, era capaz de llegar a casa, estar con sus hijos y vivir su vida, desconectando de todo lo demás.

Si una persona que tiene en sus manos vidas humanas puede hacerlo, ¿no vamos a poder nosotros que trabajamos con cosas que no son de vida o muerte?

Esta conversación aparentemente tan sencilla me ayudó a poner en perspectiva muchas cosas y a entender que, cuando hagas algo bien, tampoco te lo creas mucho y que cuando hagas algo mal, tampoco te lo tomes a pecho.

Todos los días va a haber problemas, todos los días va a parecer que se acaba el mundo, pero tú decides si quieres hacer que eso gobierne tu vida y estar 24 horas enfadado, o si quieres ser inteligente y aprender a manejarlo para que no te afecte.

el problema

No puedes controlar muchas cosas que pasan todos los días, pero sí tienes el poder de analizarlas, conectarlas con la realidad y ponerlas en perspectiva.

Así que ya ves, 3 ideas de sobra conocidas pero que no viene mal recordar de vez en cuando. Espero que te hayan ayudado tanto como a mí.

Siéntete libre de comentar y/o compartirlo donde quieras.

Gracias por leerme 🙂

¡Vaya despropósito de Año Nuevo!
Se trata de progresar, no de ser perfecto

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